
Selección Del Material De Fricción
El ahorrar $10 en las pastillas para un trabajo de frenos de $200 solamente le ahorra al cliente el 5%.
Porque los frenos de disco de hoy son más livianos y con una fricción más eficiente, estos se han hecho
muy sensibles a las diferencias en los materiales de fricción, la idea de seleccionar una pastilla de frenos de calidad está llegando a ser cada vez más relevante para el instalador consciente de la calidad.
Para ilustrarlo, los fabricantes del mercado de accesorios de frenos de disco de alto rendimiento ofrecen literalmente docenas de pastillas para competencias que son de calidad igual, pero que varían ampliamente en las características de funcionamiento. Un conjunto de pastillas para carreras para “pavimento” puede proporcionar una máxima potencia de frenado y una buena respuesta del pedal solamente cuando se alcanzan temperaturas altas de funcionamiento. Un conjunto de pastillas “sucias”, por otra parte, deben funcionar a los mismos estándares mientras que funcionan a temperaturas perceptiblemente más bajas. Menos obvio, la diferencia principal entre los dos tipos de pastillas es simplemente la cantidad de torque axial que cada una debe soportar durante un periodo extendido de frenado.
Los mismos tipos de diferencias de funcionamiento pueden existir en el mercado de pastillas superior. También, es importante recordar que el funcionamiento aún de la mejor pastilla de freno de disco se puede comprometer por la mala preparación del rotor y de la mordaza de los frenos de disco.
Selección De La Pastilla
Al seleccionar las pastillas de freno, tenga presente de que un ahorro de $10 en las pastillas en un trabajo de frenos de $200 solamente le ahorrará un 5 por ciento el cliente. Mientras que el 5 por ciento pudiera parecer como un “número grande” desde el punto de vista comercial, difícilmente pagará por los regresos causados al usar pastillas de freno de mala calidad o de una mala instalación.
La mayoría de las quejas del cliente relacionadas a las pastillas generalmente caen en cuatro categorías: 1) ruido; 2) respuesta del pedal; 3) vida del servicio; y 4) desempeño general de frenado. La mayoría de los propietarios odian la molesta temperatura y la humedad, los sensibles chirridos y chillidos de los frenos.
Después, puesto que la mayoría de las situaciones de frenado caen bajo la categoría de suave a moderada, la sensación y la respuesta del pedal es muy importante. La vida del servicio, por otra parte, es un factor primario si el vehículo se conduce en una situación de servicio de alto kilometraje anual. La vida del servicio puede también relacionarse con el rendimiento de frenado, especialmente con las camionetas y los SUVs usados para remolcar o en situaciones de acarreo de carga.
Por último, el desempeño general de frenado, que incluye la potencia al parar y la resistencia a la descoloración por el calor, no se considera normalmente en el mercado del consumidor. Se convierte en una consideración, sin embargo, si el vehículo se conduce en áreas montañosas o está sujeto a las condiciones de manejo de alta velocidad tales como los vehículos de la policía o los de emergencia.
En todo caso, la experiencia del mundo real es la mejor evaluación del funcionamiento de las pastillas. Al Observar cómo los diferentes materiales de las pastillas se comportan en los diversos vehículos y las situaciones de funcionamiento y al comunicándose con su proveedor de fricciones, usted puede recomendar la mejor pastilla para cada aplicación. Como con cualquier esfuerzo técnico, el conocimiento de un producto específico es una característica que separa al aficionado del verdadero profesional del servicio automotriz.
Interacción Del Rotor Y De La Pastilla
Porque un rotor nuevo se diseña para ser compatible con una variedad de materiales de fricción de las pastillas, un disco nuevo, al salir de su caja generalmente viene con un acabado suave, como un espejo. Pero esto no significa que está listo para colocarse en el vehículo.
Aun si el rotor viene en una envoltura de plástico, este aún necesita limpiarse con agua y jabón o con solvente. Este proceso asegura que el aceite del maquinado y las virutas de metal se remuevan de la superficie del rotor. El aceite puede contaminar las pastillas nuevas e incrementar la distancia del frenado.
Las partículas pequeñas del metal pueden encajarse en las pastillas. En algunos casos, estas quejas de ruido pueden ser remediadas solamente volviendo a rectificar con una superficie lisa el rotor e instalando un nuevo conjunto de pastillas de freno. El metal rasgado residual puede ser quitado de la superficie usando una variedad de discos y almohadillas especiales para ese propósito. Por último, es extremadamente importante lavar el rotor con agua y jabón hasta que el polvo metálico no puede ser detectado al limpiarlo con una toalla blanca a través de la superficie del rotor.
El punto clave de cualquier procedimiento de re-acabado de la superficie es reducir al mínimo los efectos del corte espiral del torno y de quitar el metal dentado que pueda incrustarse en el material de fricción. Para asegurar una superficie lo más lisa posible, el efecto de un “disco de fonógrafo” puede ser minimizado usando un corte final ligero de, digamos de 0.002 pulgadas por cara, a una velocidad de corte mínima del torno.